INTRODUCCIÓN

Qué son las peanas personalizadas para minerales

Todavía recuerdo la primera vez que vi una peana de metacrilato mecanizada con la forma de la base del mineral, fue en la Feria de La Unión. Se trataba de una piromorfita del Horcajo con una matriz de unos 15×10 cm. La peana me fascinó tanto que me atreví a decirle a mi marido, y al amigo que la vendía, que eso podía intentar hacerlo yo, sin saber muy bien por qué, ya que no tenía ni idea de fresado.

No fue hasta 2022 cuando recuperamos la idea de intentar hacer esas peanas personalizadas para nuestra colección de minerales. Después de investigar cómo podríamos abordar su fabricación, en 2023 compramos una CNC de sobremesa y comencé a hacer pruebas y pulir una metodología que todavía hoy sigo depurando. Nada tienen que ver los acabados de las primeras peanas que hice, con las que hago ahora, pero sigue quedando mucho espacio para la mejora.

Pero ¿por qué elegir una peana de metacrilato fresada para nuestros minerales de colección? Al fin y al cabo, hay muchas opciones de soportes, tanto en acrílico como en metal, sin tanto lío, menos riesgos y más económicas. Pues la razón principal es la estética.

Un mineral con su peana mecanizada y grabada adquiere otro nivel, ese nivel de pieza de museo. Sobre todo, si lo comparamos con la tan habitual opción de pegar los minerales a las peanas de metacrilato con silicona caliente. Este socorrido recurso que con los años tiende a perder lustre, y que en muchos casos llega a ponerse amarilla. Además, si queremos soltar la pieza no nos queda otra que hacerlo con acetona, o con el poco recomendado tirón [Yo también lo hice].

Ejemplar pegado con silicona ya amarilla.

Ejemplar con la peana personalizada.

Ahora bien, no todas las piezas pueden tener peana, ni todas sirven para empeanar.

¿Para qué piezas son apropiadas las peanas de metacrilato personalizadas?

Los minerales que más se benefician de una peana de metacrilato personalizadas son aquellas de alto valor añadido (las más valiosas) por coste y por estética. Esas buenas piezas que no apoyan solas, o que cuando lo hacen no lucen su mejor pose, por ser de porte vertical, por tener la base asimétrica… En cuanto al tamaño, cualquier mineral puede tener su peana, el límite lo pone la mesa de trabajo de la CNC.

¿Pueden todas las piezas tener su peana?

Todas las que tengan la matriz rígida son buenas candidatas. También son ideales los cristales flotantes. Por el contrario, las matrices arenosas, o aquellas con muchos cristales frágiles no son recomendables por el riesgo de rotura durante la elaboración del molde. También son complicadas aquellas piezas muy verticales que exigen hacer una peana con un agujero muy profundo.

Ejemplares aptos para personalizar su peana.

¿Cómo elegir el tamaño ideal de peana?

La elección del tamaño de la peana de metacrilato va un poco a gustos, al igual que escoger entre peana biselada y sin biselar.

Las convenciones estéticas clásicas abogan por las peanas biseladas, transparentes, de un mínimo de 20mm de espesor, y de un ancho por fondo en los que el mineral no sobresalga por los lados.

Sin embargo, las peanas sin biselar también quedan bien. Al igual que permitir que el mineral sobresalga un poco por los lados, dando más peso visual a la pieza y menos a la peana.

¿Dar color al grabado o no dar color?

Colorear el grabado, de nuevo, es cuestión de preferencias personales.

En la convención estética más clásica es habitual encontrar peanas grabadas con los textos coloreados en negro, plata o dorado. Sin embargo, desde un punto de vista de composición, esto incrementa la fuerza del texto como atractor visual, cuando el protagonismo debe ser de la pieza.

No colorear el texto lo mantiene en un segundo plano, pasando desapercibido hasta que, tras visualizar el mineral, el patrón visual va descendiendo hacia la peana.

¿Existen riesgos para los minerales?

Hacer una peana de metacrilato personalizada para un mineral no está exento de riesgos, incluso llevando el máximo cuidado. La fase más delicada es la primera, cuando hacemos el molde, seguida del momento en el que probamos el encaje.

La presión que se ejerce sobre el ejemplar para generar el molde exige que el mineral sea lo suficiente robusto para soportar el procedimiento. Lo mismo ocurre al comprobar el encaje entre mineral y peana.

A esto hay que sumar el riesgo durante la manipulación. Por muy cuidadoso que uno sea siempre pueden ocurrir accidentes.

¿Cualquier coleccionista de minerales puede personalizar peanas de metacrilato?

Cualquier amante de los minerales con espíritu maker puede personalizar sus peanas. Solo es necesario una inversión inicial si no disponemos del equipo, y el tiempo necesario para aprender. Además, con este manual la curva de aprendizaje hemos intentado reducirla al mínimo, lo que no quiere decir que esté todo hecho.  Queda probar y fallar y volver a probar. Igual que aprendemos a caminar caminando, aprendemos a mecanizar mecanizando.

¿Cuáles son las fases del mecanizado de peanas de metacrilato para minerales?

Hacer una peana de metacrilato personalizada para un mineral exige seguir una serie de pasos, cada uno de ellos con su procedimiento.

Hacer una peana de metacrilato personalizada requiere seis fases:

  1. Preparar el molde con la impresión de la base del mineral
  2. Tomar las fotos del molde
  3. Generar el modelo en 3D
  4. Depurar el modelo e insertarlo en el software de fresado
  5. Mecanizar el modelo en la peana (cajear)
  6. Grabar la peana

Una vez terminado ya solo queda comprobar si encajan correctamente.

Si todo ha ido bien, podemos rematar la peana colocándole un vinilo transparente en la base, o unas gotas de silicona, para evitar que se raye al moverla.

A esta peana le pusimos gotas de silicona.